Siempre le doy a los Consultantes el ejemplo del cajón desordenado.
Tu cajón está cerrado, no se ve lo que hay adentro.
Pero sabes que en algún momento tendrás que vaciarlo, porque tiene tantas cosas que ya se traba, es difícil abrirlo y cerrarlo y corre el riesgo de romperse.
Pero vaciarlo no es fácil, implica tirar todo sobre la mesa y entonces se producirá un caos mayor!
Y ahí pensarás: quién me mandó hacer esto!?! Lo hubiera dejado como estaba! Pero entonces ya no te queda otra opción que seguir.
Ordenar. Clasificar. Tirar. Regalar. Romper. Encontrarte con recuerdos. Algunos para atesorar y otros para olvidar.
Y así, en este proceso de limpieza interna empiezan los cambios positivos.
Liberando las emociones reprimidas, quitando telarañas y polvo, para finalmente tener el cajón perfectamente ordenado y sentirte pleno.
En este proceso es bueno que cuentes con apoyo, con la escucha atenta del terapeuta en el momento de la consulta y continuar
ese trabajo interior con la toma de las esencias florales.
Sin olvidar que en este proceso hay tres pilares fundamentales: Primero vos, tu capacidad y deseo de mejorar.
El segundo: yo como terapeuta apoyándote, escuchándote, alentándote.
El tercero: las esencias florales que curan todas las emociones que vayan surgiendo para equilibrarte.
Entonces qué esperas para ordenar tu cajón?
Alejandra Ruzo
