Perdona a tus padres, cada vez que te lastimaron, te abandonaron, te humillaron te estaban enseñando a ser más fuerte y más independiente.
Perdona a tu pareja que te engañó, te estaba enseñando a poner límites, a amarte a ti por sobre todos los demás.
Perdona a tu compañero de trabajo, que hablo mal de ti, que te hizo la vida imposible, porque te enseñó
que tu luz brilla tanto que lastima la vista de los demás.
Perdona a tus hijos por las insolencias, las mentiras, pues te estaban enseñando a soltar tus apegos y a entender que no puedes controlarlo todo.
Pero sobre todo perdónate a ti. Perdónate por cada vez que te dejaste vencer por el miedo, perdónate por cada error, pues de no ser por ellos, no serias la persona que eres hoy.
Tu historia es perfecta, tu vida es perfecta y aunque a veces, no lo parezca, todo ocurre para enseñarte algo, para que logres crecer.
La terapia floral puede ayudarte a elaborar tus crisis y perdonar.
Alejandra Ruzo
