Esta patología surge por acumular ansiedad y angustia mucho tiempo.
Por lo general, la persona no puede decir exactamente el motivo disparador.
Los síntomas son variados según cada caso: sudoración, palpitaciones, temblores, opresión en el pecho, miedo extremo inexplicable, sensación de muerte.
Es un abanico de ansiedad que se despliega y se va al cuerpo con estos síntomas.
La terapia floral es excelente:
-al inicio de los síntomas, para evitar que aumenten.
-En conjunto con la toma de medicamentos, las esencias son un perfecto complemento.
-Al final del tratamiento medico, al bajar la dosis de la medicación, pueden aparecer los temores a volver a tener los síntomas
y en ese momento también las flores de Bach son claves para equilibrar las emociones.
Recurrir tempranamente a la consulta floral siempre favorece a una pronta mejora.
Alejandra Ruzo

